MANIFIESTO POR LA DEPENDENCIA

Desde Aerte calificamos como muy grave la falta continuada de palabra y compromiso de la administración valenciana hacia el sector de la dependencia.

Como patronal del sector de la dependencia en la Comunidad Valenciana afirmamos que el sector no tiene por qué asumir las obligaciones que incumple la Administración. Por ello, en representación de las empresas del sector, manifestamos nuestra decepción con la Administración por su falta de sensibilidad y compromiso con los más de 30.000 dependientes que reciben nuestra atención y cuidados cada día así como con los más de 300 centros y entidades a los que ha faltado a su palabra de manera continuada y hacia los que ha demostrado una falta de sensibilidad y compromiso en el ejercicio de sus funciones.

El sector de la Dependencia valenciano, que precisamente atiende al segmento más débil y vulnerable de la sociedad, es el único sector que no ha cobrado nada en todo el año 2013 y todavía tiene pendientes partidas de años anteriores.

Además, más de 13.000 valencianos reconocidos como dependientes graves o severos siguen sin recibir sus prestaciones que por ley les corresponde porque sus expedientes están bloqueados y sin resolver. En algunos casos desde hace más de 3 años.

Este hecho pone en tela de juicio la aplicación que la Consellería de Bienestar Social está llevando a cabo de la Ley de Dependencia, una ley que ha sido recientemente reformulada y validada por el Gobierno Central pero que no está siendo aplicada por el Gobierno autonómico, una realidad calificada por Aerte como muy grave.

Son más de 12 meses los transcurridos desde que la Consellería de Bienestar Social no paga ni un Euro a muchos de los profesionales responsables de la atención y cuidados de las personas en situación de dependencia, en su mayoría mayores o personas con algún tipo de discapacidad o de enfermedad mental. Muchos de ellos incluso tutelados por la misma Administración. Denunciamos un incumplimiento de forma grave y notoria con su compromiso de pago a la población dependiente así como con la palabra dada a esta patronal de la dependencia valenciana y a las empresas representadas en ella.

Aerte ha manifestado en muchas ocasiones las dificultades por las que atraviesan los centros de atención a la dependencia, la mayoría de los cuales llevan más de un año sufragando de su propio bolsillo los gastos que no paga Bienestar Social, sobrellevando la situación con préstamos y pólizas de crédito cuyos intereses están asumiendo e incluso, en ocasiones, comprometiendo su propio patrimonio personal. Y todo ello en el mejor de los casos, que es cuando las entidades financieras pueden adelantar ese crédito ya que la deuda con la administración valenciana les ha llegado al límite.

No por repetido el discurso, deja de ser menos grave. La situación es insostenible. Todo esto se agrava con la situación precaria en la que están inmersos esos más de 13.000 dependientes que tienen reconocidos sus derechos por la Ley de Dependencia y no están recibiendo el servicio. Tienen el derecho de percibir una prestación desde hace años en la mayoría de los casos, y llegan a fallecer en la mayoría de las ocasiones antes de verlo realizado, de nuevo, por incumplimientos.

Con este manifiesto, Aerte desea trasladar al conjunto de la sociedad valenciana la injusta y desesperada situación por la que atraviesan las empresas responsables de la atención a la población dependiente en la Comunidad Valenciana, cuyos problemas generados por los impagos de la Administración Valencia van a desembocar inevitablemente en el cierre de centros y entidades que prestan el servicio a la dependencia.

La respuesta por parte de la Administración Valenciana es la del silencio y una total falta de sensibilidad.

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